Recién escapados de la carcel, Wolf Hudson y Antonio Milán se están escondiendo en el bosque cuando el policía les pilla justo cuando acaban de quitar sus monos naranja para cubrir las huellas. Afortunadamente para ellos, el policía es un buen puto que le cuesta ocultar su interés por las dos pollas grandes que están colgando delante de sus ojos. Es en un claro lejos de las miradas indiscretas que se abren las hostilidades. Despues de haber ordenado a Antonio que chupe a Wolf, se pone de rodillas y se traga las dos pollas, una tras otra antes de dejarse follar el culo y cubrir de esperma por los dos tíos!
